Programación de un sistema semi-automático para operar en bolsa

Abstract

El objetivo de este proyecto es el de desarrollar un sistema para invertir en bolsa a medio plazo, que demuestre haber sido rentable en el pasado y al mismo tiempo requiera poco tiempo de dedicación a los mercados por parte del usuario. Se trata de un sistema con las condiciones de entrada en valores, así como las de salida, completamente definidas. De este modo se desecha por completo la discrecionalidad por parte del usuario en el proceso de toma de decisiones. Los métodos para lograrlo son, en primer lugar la aplicación de una filosofía adecuada a la hora de acercarse a la bolsa. En segundo lugar el análisis técnico de los gráficos, que parte de la base de que en el gráfico de las cotizaciones se encuentra toda la información útil y necesaria para analizar si una determinada inversión puede resultar interesante o no; esto incluye el diseño de indicadores técnicos desarrollados a partir de la información presente en la evolución del propio precio de cotización y el volumen de negociación desarrollado por los activos. Por último, el desarrollo de rastreadores de mercado capaces de filtrar en pocos minutos aquellos valores que cumplan con las condiciones de entrada establecidas por el sistema creado; de esta forma se ahorra al usuario el tener que buscar manualmente entre miles de valores, aquellos que cumplan las condiciones establecidas. Los resultados obtenidos tras testear el sistema sobre varios países de la Eurozona son satisfactorios pues las tres alternativas del sistema desarrollado logran obtener rentabilidades positivas de forma recurrente durante todo el periodo de testeo (desde inicios de 1998 a finales de 2014), superiores a la media obtenida por la bolsa y a las que se suelen obtener a través de renta fija. Asimismo las rachas de pérdidas que atraviesan los sistemas no resultan desmesuradas y por tanto no son complicadas de asumir psicológicamente. Al mismo tiempo, con aplicar los rastreadores de mercado una vez terminada la semana y los criterios de desempate entre candidatos en caso de no tener suficientes huecos en la cartera de inversión, basta con una sesión a la semana de máximo tres horas de duración para formar una cartera desde cero. Con lo que el tiempo dedicado a la bolsa es muy reducido y permite al inversor dedicarse a otras actividades profesionales a la par de gozar de su tiempo libre sin estar constantemente pendiente de los mercados financieros.