El fenomeno de la mezcla en depósitos de abastecimiento de aguas tiene un efecto directo en la calidad del agua saliente. La creación de zonas de mezcla pobre y la estratificación pueden tener efectos negativos en la salud pública. El diseño de un depósito de abastecimiento debe considerar las condiciones de entrada y salida, así como su orientación (vertical o horizontal) para prevenir la formación de esas zonas. Experimentos realizados en un modelo reducido, de base rectangular i considerando tres entradas diferentes (una por caída libre situada en la mitad del lado largo, otra igual situada en la mitad del lado corto y finalmente una tubería situada en la mitad del lado corto) se han fijado como objetivo decidir cuál de estas entradas conseguía la mejor eficiencia de mezcla. Se consideraron cuatro situaciones distintas en cada una de las entradas, dos situaciones no permanentes: llenado y vaciado, u dos situaciones permanentes con diferente combinación de las salidas. Además, se estudiaron también los efectos que pueden producir las columnas que aguantan el techo del depósito, sobre la eficiencia de la mezcla.